Construir vínculos desde la palabra
Hoy he mantenido una conversación con un amigo. Para mí, es mi amigo, y sin embargo, en el transcurso de un diálogo ligeramente "tenso", ha aparecido una palabra inesperada: vínculo . Ha dicho "nuestro vínculo" cuando yo habría dicho "amistad". Me ha parecido curioso. Todo me parece curioso últimamente (publiqué precisamente una entrada con ese título, el pasado 23 de marzo). ¿Es solo una cuestión semántica o hay algo más profundo en la elección de las palabras? Reflexiono sobre esto porque me encuentro en un momento personal en el que cuestiono todo, en el que cada interacción y cada palabra pueden abrir una puerta a la comprensión o cerrarla con un golpe seco. Siempre he hablado sin demasiados filtros, sin medir demasiado el peso de las palabras, pero ahora me pregunto si es un acto de responsabilidad o de control consciente el adaptar el lenguaje según el interlocutor. No se trata de disfrazar el pensamiento ni de someterse a la sensibilidad ajena, s...